Los intocables
Por Andréia Simas
Todos hablan.
Las noticias,
Los mensajes,
Las conversaciones,
Las miradas…
Hasta el silencio habla.
Las calles vacías hablan,
Las ventanas de los vecinos hablan,
Los estantes medio vacíos de los mercados también hablan.
Hablan del virus.
De la plaga,
De la crisis.
Dicen que es invisible y silencioso,
Que casi no se presentan síntomas.
Equivocados están todos.
¿Serán ciegos?
La plaga no es invisible.
Tiene carne y huesos,
Tiene voz e incontables rostros.
La plaga se alimenta del dinero,
De la ganancia,
De la productividad,
Se alimenta del oportunismo,
Y de esa tal resiliencia de la que tanto hablan, pero poco$ tienen.
Los que hablan son vendedores engañosos,
Son mentirosos.
Te vendieron un sueño,
El American dream,
¿Ya ves?
The Pursuit of Happiness fue una gran estafa.
El imperio se ve bonito y brillante de lejos,
Pero cuando te acercas,
Pisas en barro y huele feo.
Hay mucho silencio y estadística,
Pero hay poca acción y poco coraje de reconocer que somos los perdedores.
Nadie se toca,
Y de tanto que no se tocan,
Tampoco tocan lo prohibido.
Ya no tienes voz para gritar,
Ni ojos para ver.
El enemigo te ha dominado,
Te ha castrado en tu naturaleza,
Te ha dejado dependiente.
¿Y ahora?
Ahora eres uno de ellos también.
El virus también eres tú.
Así como ellos.
Pero en medio al silencio aún se escuchan unos gritos,
De desespero y de esperanza.
El duelo va a cumplir su ciclo, sí.
Pero no olvides,
El virus eres tú.
Y yo lo único que pido es,
Que el silencio que me duele no me permita olvidar,
Quienes son los verdaderos intocables...
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Selva
on 14 abril 2020Muy cierto! no nos permitamos olvidar….