A rescatarse, he dicho.
Por Selva Rodríguez
Es momento de rescatarse. Sin duda, todo lo que estamos viviendo como sociedad, el aislamiento, la convivencia familiar, la falta de cotidianidad y el contacto físico con nuestros amigos y familiares, la incertidumbre y los miedos, nos llevan a hacer una introspección. Nos obligan a mirar hacia atrás con análisis y hacia el futuro con desconcierto. Al menos esto me está pasando a mí, y si bien al principio lo encontré extenuante he aprendido a potencializar esos momentos de reflexión para tratar de entender cómo fue que llegué al lugar donde estoy hoy.
Quiero aclarar que estoy agradecida por estar en la situación privilegiada de poder estar en mi casa, explotando mi creatividad y nuevos proyectos que me llenan de entusiasmo, y que tengo gente que me quiere y se preocupa por mí. Soy consciente de la fortuna que es hablar con mis amigas y familia más de lo usual, y sé perfectamente que mucha gente no tiene esta suerte.
El pasado pisado
Mirando al pasado por un momento siento que estuve en una nube donde todo era borroso y gris. Estaba haciendo un trabajo apasionante y divertido, percibido por muchos como “envidiable” por su glamour y diversidad de tareas. Sin embargo, no era feliz. Sobre todo en el último año, en el cual lloré, aunque sea por un minuto, cada día. Estaba tan mal que llegué a pensar inclusive que mi capacidad intelectual estaba agotada y que me estaba entorpeciendo.
Me costó bastante comprender que mis resultados eran evaluados con un nivel de crítica superior y que cada día la barrera parecía elevarse con nuevos estándares de perfección. No pongo en duda que, para el crecimiento profesional, nuestra capacidad de superación juega un papel importante, pero en este caso aparentemente no iba precisamente hacia mi crecimiento profesional, sino mas bien en picada hacia abajo en una montaña empinada.
La falta de feedback positivo y crítica hizo que me sintiera cada vez más inútil e incapaz. Hizo que cometa errores básicos y hasta desaprenda algunas cosas, tales como la capacidad de expresarme correctamente en un idioma con el que he convivido por los últimos 11 años y que uso a diario, por ejemplo. Mi opinión no era válida y mi trabajo inútil. No importaba cuantas horas le dedicara, siempre tenía errores. En un punto llegó a parecerme totalmente claro que mi inseguridad me estaba arrastrando hacia la mediocridad y decadencia mental.
Esto me había pasado antes. Sin embargo, aparentemente ahí estaba viviéndolo todo nuevamente porque no había aprendido la lección. Los que me conocen bien saben que nunca he sido una persona insegura, que siempre he tenido mis opiniones personales, acertadas o no, pero bien claras, y que la comunicación nunca me ha significado un problema. Estaba consumida, agotada.
Hay personas que te hunden….
Una de las preguntas típicas de una entrevista laboral requiere mencionar nuestras fortalezas y debilidades, y también es usual que el entrevistado trate de buscar debilidades que no se vean tan mal a los ojos del entrevistador. Si sos ansiosa, seguro dirás que a veces te frustra la burocracia. Si sos descuidada con los detalles, dirás que, en el afán por ser expedita, a veces dejas de lado pormenores que no consideras necesarios. Ejemplos como estos cientos, miles. Todos mentimos en las entrevistas o por lo menos disfrazamos las ideas con pimpollos y moños de colores.
Tal vez si fuésemos más sinceros con esta información que le estamos dando a nuestro futuro empleador podríamos posicionarnos mejor para tener éxito, ya que las tareas asignadas tendrán diferentes niveles de expectativa dependiendo de si representan nuestra debilidad o nuestra fortaleza. De esta manera, podremos recibir más apoyo o mas detalle en la instrucción cuando lo precisamos y dejar volar la creatividad e independencia cuando la tarea es “nostro forte”.
Las personas que te hunden son precisamente las que conocen bien tus debilidades y se enfocan en la pesquisa, haciendo especial hincapié en cada ocasión que se presente, depreciando resultados, señalando sospechosamente y metiendo el dedo en la yaga. Ahí mismo, donde más nos duele. Si tu estima está baja y tu capacidad inmunodeprimida, sin duda esto te aplastará como un elefante a una hormiga. Y eso fue lo que me pasó a mi.
A capa y espada
Si te encuentras en una situación similar quiero darte la buena noticia de que tu superhéroe de salvación está dentro tuyo. Nadie va a sacarte de tu propia inseguridad, eres tú el que tiene que dar el primer paso a rescatarse. Primero tienes que sacar la mano del pozo para que acudan a tu auxilio. A capa y espada, mi primer consejo es salir de la situación, por más difícil que resulte. Busca otro trabajo, ahorra para poder subsistir mientras encuentras una solución, trata de envolverte en tu capa “anti-negatividad” para que el feedback perjudicial y los dedos dirigidos a tus yagas no te toquen y salgan expulsados por el aire.
Una historia larga, pero, para hacértela corta. Una vez que logré salir de ese círculo nocivo y desgastante, me llevó un tiempo ver la luz al final del túnel, pero me di cuenta que la nube en mi cabeza se disipaba de a poco. No te voy a decir que todo se cura como por arte de magia, pero el empoderamiento y autoconfianza regresan a abrazarte y eso te llena de energía para comenzar a mover los músculos dormidos y adoloridos.
… y hay personas que te levantan
Sin duda tengo la dicha de tener un círculo familiar muy sólido y amigos de hierro que estuvieron y estarán a mi lado. Estas son las personas que te levantan, que alimentan desinteresadamente tu energía, tu autoestima y tu amor propio. Que te cantan la justa cuando estás desacertada y te regañan cuando no sos vos misma en un intento desesperado de que vuelvas a tu estado natural. Esto me dijo ayer una amiga muy querida, y la cito:
-—Te juro que era como si hubieses estado dormida, y ahora lo confirmo. Claramente no eras feliz en el lugar anterior. Mirá que ahora no estamos en la mejor situación y, sin embargo, te veo más alegre y pilas que antes.
A veces nos distraemos tratando de cumplir con las expectativas o de agradar a las personas equivocadas. Mientras tanto, perdemos tiempo en demostrar que podemos, que somos capaces, solo por aceptación. Sin embargo, la única aceptación que necesitamos es la propia. Yo sé quien soy y me permití desconocerme, desconfiarme, detenerme y me defraudé a mi misma.
Pero esta historia tiene un final feliz. La aceptación, mi capa, mi espada y un séquito de “cheerleaders” increíbles me ayudaron a reencontrarme y creer nuevamente que soy quien soy. ¡Y me gusta!
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Gaby
on 22 mayo 2020Esto es muy cierto. No cabe duda que la gobernanza y medidas de regulación en los trabajos es algo sumamente importante. Las cosas se salen de control rápidamente y muchas mujeres de alto rendimiento y ética profesional somos más vulnerables a caer en este círculo vicioso de intentar cumplir con estándares irracionales de gente sin ética.
Norma lorefice
on 22 mayo 2020Uuuyyy!!! Esta es la PERSONA que vi N acer!!! Me emociona y me enorgullece tenerla!!! Te has mostrado como sos!!! Se que pasaste momentos desagradables… porque??? Porque l oí s sentí dentro mio!!!. No voy a alabahate!!! Voy a FELICITARTE!!!con un fuerte abrazo!!! Tus palabras son t an certeras que siento que solo me queda decirte que no hay dudas ni nada nuevo que agregar!!! Que la fortaleza se saca de adentro, que hay que mirar al otro y no seguirlo, aprender que cuando te subestiman solo están proyectando sus debilidades y quizás también sus miserias ( por no decir siempre) . Qye todo lo que vivimos siempre es para aprender y sup erarse, no para achicarse, eso NUNCA!!! Te hiciste solita, y eso es mucho más valioso aún quee sacarse un 10 en un examen!!! Estas educando,brindando herramientas valiosas a otros y eso… no tiene precio!!! A disfrutar del ahora!!! Siempre es tiempo de avanzar y más cuando mirando para atrás. NOS ENCONTRAMOS a nosotros mismos !!!
Y siento que no hay nada mejor!!! Voy a mandar algo que acompaña desde h ace mucho… » si alguien, cayendo de si mismo, en si mismo m Manotea para sostenerse de si, y encuentra entre el y el una puerta que la lleva a otra parte, FELIZ DE EL, pues ha encontrado el borrador M as antiguo, la copia original» autor anonimo.
Romina
on 22 mayo 2020Hermoso!!! Me encanta que escribas y que dejes al descubierto tantas verdades colectivas! Eso realmente EMPODERA.
Felicitaciones por volver a la de siempre.
Natalia
on 22 mayo 2020Me encanto este relato tan real y cotidiano! Donde sin dudas debemos estar alerta de las personas que solo quieren hundirnos para alejarnos cuanto antes… y no tengo dudas que la gente que nos levanta y nos quiere ver triunfar es la gente nos quiere de verdad!. Amiga te quiero y te adoro un montón! Nunca más dejes que te roben esa magia que te caracteriza y si alguien lo intenta aquí estaré para ayudarte a volver a ese lugar feliz!
Pato
on 22 mayo 2020Muy bueno el artículo Selva! Quien no sintió esto en algún trabajo? Me retrotrajo a los tiempos de mi último trabajo en relación de dependencia y esa sensación de inutilidad externamente inducida… recuerdo haberla sentido en carne propia tal cual la drscribis. Muy bien expresado aquí.
Guillermina
on 23 mayo 2020Muy linda nota Selvi! Conociéndote, se que atravesaste varios momentos difíciles en tu vida y me alegra de corazón que hoy estés plena otra vez y hayas podido encontrar tu súper héroe dentro tuyo y ser otra vez la Selva que hace ya varios años que conocí .
Selva
on 25 mayo 2020Gracias por los comentarios y el apoyo constante a todas!
Cecilia
on 25 mayo 2020Tengo el honor de formar parte de tu círculo de amigas, de esas que se aman a pesar de la distancia y la mala señal de wifi a veces…y si de alguien aprendí y sigo aprendiendo esa capacidad de reinventarse y de ir por sus sueños no matter what es de vos amiga. Nunca dudo de que tus nubes grises son pasajeras y de las que son necesarias para seguir creciendo… (nadie crece en nubecitas de colores eternas )…Pero hoy te leí desde mi rol de líder en una empresa e hiciste que ponga en duda o al menos me llevaste a pensar si soy de esos jefes que potencian o que anulan…. sin duda quiero estar en el lugar de los que potencian pero es un compromiso que debe renovarse con uno mismo todos los días para evitar caer del otro lado a pesar de atravesar nuestras propias nubes grises y evitar que eso afecte a tu equipo. Gracias por compartir!
Veronica Torres
on 27 mayo 2020Grande Selvis! Si algo puedo decir de esta potencial escritora, es q es puro corazon!
Tuve la suerte de compartir con ella casi cuatro meses en su ciudad y lo unico q puedo decir es GRACIAS! Por bancarme, alentarme y perdonarme mis defectos y seguir siendo amigas como siempre!
Te debo todoooo, ojala la vida me permita algun dia devolvertelos!
Sos grosa amiga y estoy orgullosa de vos!
Te extraño y te quiero para siempre! ❤️
Soy yo! Vero de San Juan!